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sábado, 31 de marzo de 2012

Un estilo diferente de ser Rey


  En un clima de violencia y de inseguridad pública celebramos hoy el Domingo de Ramos y aclamamos a Jesús como Rey.

De ordinario celebramos a Jesús como a cualquier jefe de Estado que se pone por encima de los demás, que actúa en forma autoritaria, que está muy lejos del pueblo, que gobierna en beneficio de sus allegados, y que no tiene planes a favor del pueblo. Esta manera de gobernar genera una sociedad desigualitaria que propicia un ambiente de violencia e inseguridad pública.

Nos preocupamos mucho por el culto al Rey, pero poco vivimos y hacer realidad en nuestra vida personal y social, los valores de su Reinado: El amor, la justicia, la paz, la verdad En este momento de violencia y de inseguridad pública es contrario a la celebración de hoy, el proclamar a Jesús como Rey, sin una decidida opción por la paz con justicia

Hoy, Domingo de Ramos, nos encontramos con Jesús que es reconocido como Rey por el pueblo y condenado a morir en la cruz por los jefes de los escribas y los jefes de los sacerdotes. Acompañan a Jesús los galileos, que han escuchado la Buena Noticia del Reinado de Dios. Son los pobres que han visto en Jesús al Dios con nosotros, que alimenta, sana y libra de la marginación, al que devuelve la dignidad y da la esperanza de un mundo nuevo. Ellos reconocen a Jesús y lo proclaman bendito porque viene en el nombre del Señor. Lo hacen de forma espontánea tendiendo sus mantos y cortando hojas de los árboles de la orilla del camino Jesús, a diferencia de los grandes de este mundo, monta en un burro, que es el animal que sirve al pueblo para sus actividades diarias

Por otra parte, los jefes de los sacerdotes, los escribas y los ancianos, en complicidad con Judas, han decidido dar muerte a Jesús por ser un hombre incómodo • Porque no respetaba el sábado (Mc 2,27)
• Porque no observaba las normas de pureza (Mc 7,1-23)
• Porque modificaba la ley de Moisés (Mt 5,20-48)
• Porque se rodeaba de gente excomulgada (Mc 2,13-14 •
Porque comía con personas de mala fama (Mc 2,15-17)
• Porque tocaba a los leprosos y a los muertos (Mc 1,41; 5,41).

Y  las autoridades, a pesar de haber hecho varios intentos de apresarlo y darle muerte, no pudieron hacerlo por temor a la reacción de la gente. Sin embargo en cierto momento Jesús hizo algo que colmó la paciencia de los gobernantes, y les brindó la oportunidad para acabar con su vida: La expulsión de los vendedores del Templo de Jerusalén por parte de Jesús.Los jefes de los sacerdotes, los jefes de los escribas y los ancianos hicieron alianza entre ellos y con Judas para llevar a Jesús a la muerte en la cruz.

Con el pueblo y como el pueblo, reconocemos a Jesús como nuestro Rey, pero después de aclamarlo en el culto, nos comprometemos con nuestro Rey a vivir los valores de su Reinado y a luchar por la paz con justicia, mediante la denuncia profética de la injusticia y la propuesta de soluciones para construir la paz desde lo pequeño.

Esta celebración nos exige una lucha contra el poder económico, político e incluso religioso cuando son generadores de injusticia y desigualdad, porque ese poder sigue crucificando a Jesús en las víctimas de la injusticia y la desigualdad

Frente a la represión que suele acompañar a los defensores de los Derechos humanos a los que luchan por la paz, con Jesús y como Jesús busquemos en el compromiso (alianza) con el Padre y con la comunidad, la fuerza para continuar la causa de la paz con justicia. Qué caminos proponemos? ¿Con qué personas o grupos vamos a hacer alianza para construir la paz con justicia que es la ley de nuestro Rey? ¿Dónde y con quién nos reuniremos para hacer una oración que fortalezca nuestra esperanza? Hagamos propuestas Abril 02 2012 CCR

sábado, 24 de marzo de 2012

En la lucha por la paz con justicia
Con Jesús venzamos el miedo

El esfuerzo por construir la paz con justicia significa enfrentamiento con los poderes que impulsan, legitiman o silencian la injusticia y la desigualdad que dan como fruto la violencia y la inseguridad pública.
Las víctimas de estos poderes tienen miedo pues se sienten sólos y desamparados, sin medios para enfrentar el grave peligro que entraña enfrentar el poder.
Hay necesidad de que los creyentes y la sociedad demos la cara por las víctimas, pero el miedo nos paraliza, nos encierra, nos vuelve individualistas y la obra de la paz con justicia camina muy lentamente. Evidentemente da miedo enfrentar el poder represivo.

El mismo Jesús vivió la experiencia del miedo: Después de que devolvió la vida a Lázaro, el evangelio de Juan nos dice: “Los sumos sacerdotes y los fariseos convocaron consejo y decían: "¿Qué hacemos? Porque este hombre realiza muchos signos. Si le dejamos que siga así, todos creerán en él y vendrán los romanos y destruirán nuestro Lugar Santo y nuestra nación." (Juan 11,47-48). Desde este día, decidieron darle muerte. (Juan 11,53) Los sumos sacerdotes y los fariseos habían dado órdenes de que, si alguno sabía dónde estaba, lo notificara para detenerle. Juan 11, 57.
Jesús está consciente del peligro que le acecha, seguramente ha meditado el libro de la Sabiduría:
“Pongamos trampas al justo, que nos fastidia y se opone a nuestras acciones; nos echa en cara nuestros delitos y reprende nuestros pecados de juventud. Presume de conocer a Dios y se presenta como hijo del Señor.
Es un reproche contra nuestras convicciones y su sola aparición nos resulta insoportable, pues lleva una vida distinta a los demás y va por caminos diferentes.
Nos considera moneda falsa y nos evita como a apestados; celebra el destino de los justos y presume de que Dios es su padre. Ya veremos si lleva razón, comprobando cuál es su desenlace: pues si el justo es hijo de Dios, él lo rescatará y lo librará del poder de sus adversarios.
Lo someteremos a humillaciones y torturas para conocer su temple y comprobar su entereza. Lo condenaremos a una muerte humillante, pues, según dice, Dios lo protegerá." (Sabiduría 2, 12-20).
Declara por ello que ha llegado la hora de su glorificación es decir de enfrentar la experiencia de la muerte, que le vendrá, según San Juan, del poder de los que enseñan la ley y de los que presiden el culto, que reprimen a quienes no están de acuerdo con ellos.
Ilustra la necesidad de su muerte comparándola con el grano de trigo que tiene que morir en la tierra para que surja una nueva planta que dé fruto en abundancia.
Aclara que aquellos que por miedo a arriesgar la vida, se apartan de la causa del Reino y del testimonio de la paz y de justicia, van a perder la vida verdadera. Mientras que aquellos que entregan su vida por la causa del Reino dando un testimonio de paz y de justicia tendrán la vida plena
Declara también que tiene angustia-miedo al enfrentar esta situación, pero se declara totalmente dispuesto a correr el riesgo. El Padre lo respalda brindándole su apoyo
Más aún Jesús invita a sus servidores a que lo sigan para que estén donde El va a estar.
La fiesta de María que hoy celebramos nos tiene que recordar que ella es la mujer, que venciendo su pequeñez, de campesina nazaretana, y acompañada de otras mujeres, se coloca al lado de Jesús, crucificado por luchar por la justicia y la paz y víctima del poder político y del poder religioso.

Con el apoyo que el Padre brinda a Jesús y a nosotros, unidos a todos los que buscan la paz con justicia, con objetivos claros y estrategias eficientes, sigamos la lucha por la paz con justicia.
Propongamos actividades, formas de organización, conozcamos otras organizaciones, apoyemos CCR

24 de Marzo: Las palabra de Monseñor Romero

La predicación de Monseñor Romero fue muy conocida pues fue difundida por la radio YSAX.

En las homilías de Monseñor Romero aparecen dos momentos importantes:
• Una información clara de los acontecimientos de la semana leídos desde una clara opción por los pobres y •
Una muy clara iluminación bíblica, analizando las lecturas del día

Lo que resalta en sus homilías es:
• Su postura a favor de las víctimas de la represión y
• Su apoyo a la organización del pueblo: Campesinos, obreros estudiantes.

Monseñor Romero hace un análisis muy lúcido de los acontecimientos de la semana, análisis que supone el apoyo de un equipo especializado en la materia y presentado con el toque personal de Monseñor.

Realiza además un profundo estudio bíblico relacionándolo con los acontecimientos de la semana, indudablemente fruto de una profunda meditación de la Palabra y apoyada por un equipo de muy buenos biblistas.
Manifiesta también su valoración profunda de la persona humana y la defensa de su dignidad y de sus derechos

Para quienes tenemos que iluminar la vida del pueblo (Sacerdotes, Catequistas, Animadores de grupo ¡Qué bueno sería que, a ejemplo de Monseñor Romero:
• Nos propusiéramos la tarea de estar al tanto de los acontecimientos leyéndolos desde la óptica de los pobres y
• Los ilumináramos con un buen estudio de la Palabra e
• Impulsáramos un trabajo en defensa de la dignidad de la persona, la defensa de los derechos humanos para la construcción de la paz con justicia!

sábado, 17 de marzo de 2012

Jesús, Salvador De la muerte del hambre y de la enfermedad

En el momento presente la vida humana se ve en grave peligro: Grandes zonas de África Oriental se enfrentan a la peor crisis alimentaria del mundo. Se calcula que al menos 15 millones de personas se encuentran amenazadas por la inseguridad alimentaria, debido en parte a un descenso localizado -pero significativo- de la producción agropastoril. Esta crisis se debe a una combinación de factores, incluyendo la sequía, el fuerte descenso en la producción de cereales y su elevado precio; la escasez de forraje para el ganado, la reducción de las remesas de los emigrantes en diversos países, la degradación medioambiental, el desplazamiento de la población y una pobreza crónica agravada por la crisis. Algunas de las principales enfermedades que afectan actualmente a los países en todo el mundo incluyen el VIH/SIDA, malaria, gripe aviar y tuberculosis. Estas situaciones son producto de la injusticia y desigualdad, engendradas por un sistema que privilegia a los eficientes, productivos y poderosos, mientras que excluye a los débiles y faltos de poder. Las soluciones, por lo tanto, tienen que ir a la raíz del problema, tienen que ser soluciones estructurales y no meramente asistenciales, aunque temporalmente urgen acciones asistenciales Frente a esto las instituciones religiosas, incluída la nuestra, dedican gran cantidad de esfuerzos a rendir honor a las grandes personalidades, a realizar un culto suntuoso y a incrementar el número de adeptos. Poco o ningún esfuerzo estamos dedicando a liberar a los hermanos del grave problema del hambre y de la enfermedad. El evangelio que leemos hoy, nos presenta un encuentro de Jesús con la institución judía representada por Nicodemo. Esta institución ofrecía a los creyentes la salvación por medio de la práctica de la circuncisión, del cumplimiento de las leyes de pureza y la observancia del sábado. Jesús le hace ver a Nicodemo que es Dios quien salva y no las instituciones, y que la salvación es fruto del amor de Dios por la humanidad, y que la salvación que Dios ofrece tiene como finalidad que la humanidad tenga vida sin fin. Con esto, Jesús se declara en contra de todo lo que oprime a la persona y todo lo que conduce a la muerte: el hambre, las enfermedades, la exclusión, la falta de servicios primarios, la contaminación de la atmósfera etc. Los creyentes tenemos que dar una respuesta a la oferta de vida que Dios nos hace: Tenemos que aceptar a Jesús El enviado del Padre, como el camino a seguir, tenemos que aceptar su palabra como fuente de esperanza y como norma de vida y su proyecto del Reino como nuestra práctica y nuestro estilo de vida. Fundamentalmente tenemos que cambiar nuestra imagen de Dios, tenemos que dejar de ver a Dios como el que exige la observancia de leyes y costumbres tenemos que ver a Dios como el Padre que ama a todos y ofrece a todos abundancia de vida, tenemos que ver a Dios como el que quiere que nosotros, con Jesús, luchemos contra todo lo que impulsa u ocasiona muerte Necesitamos profundizar en nuestra manera de entender y practicar la salvación de Dios, tenemos que entenderla y practicarla como un esfuerzo para que haya vida. Tenemos que luchar contra todo lo que pone en peligro la vida de la humanidad: la vida de las personas, la vida de los animales, la vida de las plantas, la vida de la naturaleza toda, el agua, el aire, en fin todo lo que Dios creó A pesar de todo hay esperanza, hay organizaciones que luchan contra el hambre y la enfermedad descubriendo y atacando sus causas: OXFAM http://www.oxfam.org/es, y Comercio justo http://www.comerciojusto.com.mx/ luchan contra el hambre y Médicos sin frontera contra la enfermedad http://www.msf.es/ A nivel más casero, más propio de nuestros barrios, tenemos que ser solidarios. Podemos organizarnos para que nadie en nuestra cuadra pase hambre, ningún enfermo o anciano este sin compañía. ¿Qué otras cosas se nos ocurren para hacer realidad el deseo de Dios de liberar al mundo de todo lo que lo está matando y para ofrecer a todos una vida sin fin?

sábado, 10 de marzo de 2012

Para una sociedad De igualdad, justicia y libertad: Los 10 mandamientos




Muchos creyentes usamos los 10 mandamientos como norma de vida; pero solemos interpretarlos en forma individualista y con ello damos legitimidad al poder que oprime, que quita la libertad y crea desigualdades.

Nuestros templos, por su apariencia de grandiosidad y por la suntuosidad del culto, dan la impresión de riqueza y de comercialización.
En los templos y en la actividad de la Iglesia se hace poco énfasis en la justicia, en la libertad y en la igual dignidad de las personas y poca o nula es la denuncia en contra de la violación de estos valores.

El redactor del texto Éxodo 20, 1-17, (que refiere  la entrega de los 10 mandamientos), presenta como autor de esta ley a “Yahvé tu Dios que te sacó de Egipto, la casa de la esclavitud”  
Al colocar la entrega de esta ley al pie del Monte Sinaí, que está en el camino que va de la tierra de la esclavitud a la tierra prometida, hace de los 10 mandamientos, a la vez, una protesta y una propuesta.
Una protesta contra un proyecto de injustica, de esclavitud y de desigualdad (La sociedad egipcia). Una propuesta para establecer en la tierra prometida un proyecto de libertad, de justicia y de igualdad.

En el pueblo de Israel el primer intento de construir un templo corresponde al rey David, que con ello pretendía legitimar sus actitudes imperialistas, poniendo al mismo Yahvé bajo su control, pues el templo a construir dependería del mismo David.

Sin embargo en la Biblia el templo se  propone como lugar de Encuentro del Pueblo con su Dios y de Dios con su pueblo.
Con el correr del tiempo, hasta Jesús, el templo se convirtió en la sede del poder, no sólo religioso, sino también político y económico (En el recinto del templo se guardaban las grandes fortunas para el comercio nacional e internacional)
Los encargados del templo, los sacerdotes, controlaban todas las actividades que en él se realizaban, haciendo de él, el único espacio donde podían adquirirse las ofrendas para Dios.
Esto producía un enriquecimiento para los sacerdotes y al mismo tiempo una explotación para el pueblo, y todo esto, en nombre de Dios. Era por tanto, el templo, un símbolo del poder que exprime al pueblo en nombre de Dios.

Al realizar la purificación del templo, Jesús quita legitimidad al templo de Jerusalén y a los sacerdotes, a la vez que propone su propia humanidad como nuevo lugar de encuentro con el Padre y con los hermanos.

En el esfuerzo por vivir nuestra conversión personal, propia de la Cuaresma, es importante que vivamos los diez mandamientos como medios para vivir la justicia, la igualdad y la libertad.
Es importante que en nuestros grupos y comunidades revisemos nuestras relaciones,  para que sean de justicia, igualdad y libertad y es necesario, que todos los que participamos en grupos de Iglesia, luchemos por construir una sociedad de justicia, igualdad y libertad.
 Si nuestros templos son signo de la presencia de Jesús, es necesario que pongan de manifiesto la gratuidad de toda su obra salvadora, evitando las apariencias de comercialización y  promoviendo que los que en ellos nos reunimos, vivamos la justicia, la igualdad, la hermandad y libertad.
Además los que participamos en el templo hemos de realizar alianzas con todas las personas, grupos y comunidades de buena voluntad, para construir una sociedad de justicia, igualdad y libertad.
Hagamos propuestas, busquemos los medios ¿Cuál tiene que ser el primer paso?


  


jueves, 8 de marzo de 2012

Este 8 de marzo, nosotras, las mujeres de la Marcha Mundial de las Mujeres, seguimos marchando, resistiendo, y construyendo un mundo para nosotras, los otros, los pueblos, los seres vivientes y la naturaleza. Estas acciones continúan enfrentándose a los embates del paradigma mortal del capitalismo con sus falsas salidas a las crisis y de una ideología fundamentalista conservadora.

Vivenciamos un crisis del sistema capitalista, racista y patriarcal que, para sostenerse, impone brutales “medidas de austeridad” que obligan a nosotras, los pueblos, a pagar por una crisis que no hemos provocado: son recortes presupuestarios de todos los servicios sociales, disminución de salarios y de pensiones, estimulo a guerras y avance de la mercantilización de todas las esferas de la vida.

Nosotras las mujeres pagamos el precio más alto: somos las primeras que seremos despedidas y que, además de las tareas domésticas más habituales, somos obligadas a asumir las funciones antes cubiertas por los servicios sociales. Tales medidas cargan el peso de la ideología patriarcal, capitalista y racista y son expresión de políticas de incentivo para que volvamos a la casa, que estimulan además el avance de la prostitución y la venta de las mujeres, el aumento de la violencia contra nosotras, el trafico y las migraciones.

Denunciamos la continua imposición de acuerdos de libre comercio, que intentan transformar los bienes comunes como la salud, la educación y el agua en mercancías, y generar un mercado de explotación de la mano de obra barata en los países del sur.

Rechazamos la cultura del consumo que va empobreciendo más las comunidades, generando dependencia y exterminando las producciones locales. Nos solidarizamos con las mujeres en lucha en Europa, especialmente en Grecia pero también en Portugal, Galicia, Estado Español, Italia y Macedonia, que se están organizando para resistir la ofensiva neoliberal y retrógrada promovida por las instituciones financieras y políticas, y sus propios gobiernos, a servicio de intereses de las corporaciones transnacionales.

Nos solidarizamos también con todas las mujeres del sur que enfrentan hambrunas, empobrecimientos, esclavitud laboral y violencia pero que siguen construyendo su resistencia.

Denunciamos el avance de la militarización en todo el mundo como estrategia de control de nuestros cuerpos, vidas, movimientos y territorios y garantía para la neocolonización, el nuevo saqueo y apropiación del capital sobre los recursos naturales y la manutención del enriquecimiento de la industria armamentista en frente a la crisis. Constatamos con temor la amenaza de retorno de lo militarismo y del autoritarismo como valores en la sociedad en distintos países alrededor del mundo, como en: el Medio Oriente, en Tunicia, Libia y Egipto, donde las mujeres y los pueblos continúan a luchar contra todo tipo de dictadura fundamentalista y por verdadera democracia; en Palestina donde las mujeres luchan contra el colonialismo y el sionismo en diversos países Africanos – como en Senegal donde el gobierno se utiliza de la fuerza del ejercito por intereses electorales, o en Mali donde grupos armados aterrorizan la populación civil en su lucha por controle da la región norte; en Honduras, México, Guatemala y Colombia donde hay procesos de re-militarización; y en diversos países en Asia-Oceanía donde refuerzan la presencia de las tropas militares de Estados Unidos.

Nos solidarizamos con las mujeres y los pueblos en resistencia y lucha en todos los territorios que están en guerra, bajo control militar y en riesgo de serlo, o viviendo los impactos nefastos de una presencia militar extranjera. A pesar de ello, nosotras las mujeres continuamos defendiendo nuestro territorio, cuerpo y tierra de la explotación de los ejércitos regulares e irregulares, estatales y privados.

Denunciamos la estrategia concertada de los medios de comunicación globalizados que busca revitalizar los dogmas y valores conservadores y que ponen en riesgo los logros o avances de las mujeres en el mundo. Se cierran espacios de participación, se criminaliza la protesta, y se cercea el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos. Nuestra autodeterminación reproductiva está amenazada donde la hemos conquistado, como, por ejemplo, en diversos países de Europa (como en Portugal y España) y de Norte América donde el aborto es legalizado, pero donde este derecho es atacado en la práctica por cortes de los presupuestos públicos que tienen como blanco los hospitales y los servicios de interrupción del embarazo.

En muchos otros países, como en América Latina y varios países de Asia-Oceanía, las mujeres que abortan siguen siendo criminalizadas, como en Brasil, Japón y Vanuatu. En México se legaliza el aborto en el Distrito Federal y se criminaliza en el resto del país. En Honduras, la píldora contraceptiva de emergencia ha sido prohibida. En Nicaragua, el aborto mismo en situaciones de riesgo de vida para la madre o de violación se convierte en un delito a través de una Reforma Constitucional. Rusia sigue su ejemplo con la mujer del presidente al frente de campañas para prohibir el aborto en cualquier situación. Grupos auto-intitulados “pro-vida” defienden en realidad la muerte de las mujeres, nos insultan y a las profesionales de salud en Norte América, presionan en parlamento para rever la ley en Sudáfrica e impiden cualquier discusión en Pakistán.

Nos solidarizamos con todas las mujeres que continúan luchando y enfrentando los embates de la policía, los servidores públicos y de la justicia injusta, así como a las que enfrentan la violencia en su contra. Frente a estas situaciones, estamos en las calles, tenemos alternativas y las estamos viviendo.

Reiteramos que seguiremos fortaleciéndonos desde nuestros cuerpos y territorios en resistencia y defensa de los mismos, profundizando nuestros sueños de transformaciones estructurales en nuestras vidas y ¡marchando hasta que todas seamos libres! Llamamos a la articulación de nuestros movimientos y a las alianzas con los otros movimientos, pues solo así construiremos un mundo en libertad. En el Mundo, 8 de marzo de 2012 Adital [Enviado por Minga Informativa de Movimientos Sociales - http://movimientos.org/]. Publicado por CCR

martes, 6 de marzo de 2012

Por la superación de la mujer

Alma, Kari, Mari, Leti y Luzne forman un grupo de mujeres en el barrio
Un día al terminar la reunión comentaron:
Alma: Estaba viendo la agenda de la Parroquia y recordé que el 8 de Marzo es el día internacional de la mujer y sería bueno que fuéramos haciendo algo Leti: Sí porque todavía hay mujeres maltratadas y con maridos flojos que no trabajan.
Luzne: Yo conozco señoras grandes que tienen que hacer todo el trabajo de la casa para sus hijas casadas y además tienen que cuidar los nietos y llevarlos a la escuela
Kari: Muchas mujeres no nos damos tiempo para atender nuestra salud por atender a los demás
Mari: Mucho de esto viene porque nos inculcaron que la mujer no tiene que ir a la escuela y que en el matrimonio hay que aguantar la Cruz. El miedo y la ignorancia nos atan y nos impiden superarnos
Alma: Pero, gracias a Dios, se están abriendo espacios: En el Centro Comunitario están capacitando en manualidades, para que seamos menos dependientes.
Mari: Y algo más importante, aunque un poco más exigente: Hay un diplomado en Desarrollo humano para impulsar nuestra autoestima y ayudarnos a manejar los sentimientos.
Luzne: También hay una oficina de la Mujer y ofrecen muchos talleres, sobre todo de los derechos de la mujer
Kari: Conozco también por aquí unas personas que han tomado cursos de medicina alternativa, que ofrecen medicamentos a bajo costo y además imparten cursos de salud
Leti: Para relajarnos y romper el estrés hay clubs con terapias de baile Alma: Pues Chicas, hagamos algo permanente, empecemos por capacitarnos en Derechos de la mujer y después tomemos el Diplomado en Desarrollo humano.
Mari: Yo propongo que empecemos dando talleres sobre los derechos de la mujer Leti: Eso sería lo básico y procuraríamos que llegara al mayor número de mujeres, pero luego tenemos que avanzar en la autoestima y el manejo de nuestros sentimientos
Kari: Y de igual manera invitar a los de medicina alternativa para que nos ayuden a conocer el funcionamiento de nuestro cuerpo y la manera de cuidarlo y sanarlo
Luzne: Al terminar nos volvemos a juntar para ver lo que logramos y lo que nos falta para descubrir lo que sigue. Para que todo resulte más efectivo tenemos que hacer estas acciones en cadena y tenemos que unirnos a otras personas y grupos que luchan por lo mismo. Nos vemos la próxima semana

sábado, 3 de marzo de 2012


Cuaresma: tiempo de evaluar y de fortalecer la Esperanza
El trabajo por la paz con justicia, signo del Reino de Dios, trabajo por un mundo mejor, un mundo de justicia, un mundo de solidaridad, un mundo donde haya vida digna para todos, implica enfrentar el poder económico, el poder político y aún el poder religioso pues estos son casi siempre los que  cometen injusticias y oprimen al pueblo.
La reacción ordinaria de estos poderes es malinterpretar el proyecto de paz, el crear desconfianza hacia los que luchan por la paz con justicia, criticar y aún agredir a los que trabajan por la paz con justicia, todo lo cual propicia el desaliento y la sensación de fracaso.
Hace falta reflexionar y  evaluar lo que estamos haciendo, para mantener el rumbo correcto, hace falta revisar los caminos que estamos emprendiendo, así como las acciones que estamos realizando. Hace falta revisar los motivos por los que estamos luchando
Jesús inició su ministerio atrayendo a mucha gente que descubría en su vida y en su palabra la Buena Noticia del Padre; por ello lo seguía mucha gente. Pero, la compasión de Jesús por el pueblo lo impulsó a realizar obras que iban en contra de lo que el sistema religioso judío permitía.
No permitía, tocar a un leproso, prohibía realizar muchas cosas en sábado, ordenaba muchas purificaciones que la gente no podía realizar por la falta de agua. Jesús, preocupado más por la vida, que por las enseñanzas del sistema, puso las manos sobre un leproso, curó en sábado y no exigió a sus discípulos que observaran algunas leyes de pureza.
Todo esto molestó a los maestros de la religión judía, representantes oficiales de la misma,  que lanzaron críticas y habladurías contra el Maestro de Nazaret, provocando que  el pueblo  se retirara de JeEssús y los discípulos, se desanimaran y se sintieran como fracasados. 
Por otra parte, viendo Jesús, cómo va creciendo el ambiente en su contra, toma conciencia de  que El, como algunos profetas, será llevado a la muerte por el poder en turno: Anuncia a los discípulos su Muerte y Resurrección, lo que aumenta el pánico y la  desilusión sobre todo de los más cercanos.
Para Jesús se impone reflexionar, evaluar ante Dios el camino, para avanzar con mayor seguridad; por ello Jesús los invita a la montaña, el lugar de encuentro con Dios, para profundizar juntos, comunitariamente, el proyecto del Reino, y hacerlo a la luz de los Profetas (Elías) y de la Ley (Moisés).
El encuentro es muy emotivo: los discípulos ven a Jesús con ojos nuevos: El Padre confirma a Jesús como el Hijo amado y esto lo motiva a continuar con su misión.
Sin embargo Pedro preferiría quedarse en el encuentro con Dios, pero Jesús le dice que hay que bajar para proseguir el camino.
Con esta experiencia de encuentro con el Padre ellos tienen más claridad sobre el proyecto de Jesús y su esperanza los hará capaces de vencer el miedo, las desconfianzas, las críticas y el temor al fracaso. Aunque tendrán que vencer la tentación del miedo y la desilusión
Ante la situación de violencia y de  inseguridad pública, muchos de nosotros nos hemos quedado paralizados, hemos dejado de luchar por la paz con justicia. El miedo, la desconfianza,  la crítica y el fracaso nos mantienen encerrados y voluntariamente aislados.
Es tiempo de romper el aislamiento, es tiempos de salir del encierro, es tiempo de vencer el miedo. Es tiempo de encontrar nuevos caminos. 
Es tiempo de volvernos a encontrar, y encontrarnos nuevamente con el proyecto de Jesús: El Reino de Dios. Es tiempo de escuchar la Palabra del Hijo amado del Padre. Es tiempo de fortalecer la esperanza.
¿Dónde, cómo, cuándo, con quiénes nos reuniremos para ver con más claridad el proyecto del Reino y fortalecer nuestra esperanza